Tratamientos psicológicos de la depresión

Existen distintos tratamientos psicológicos, entre los que destaca la terapia cognitivo conductual. La TCC trata de comprender como piensa una persona sobre si misma, sobre los demás y cómo lo que hace afecta a sus sentimientos y pensamientos. Así, la persona expuesta ante un estímulo, procesa la información del medio, clasifica y evalúa dicho estímulo en función de sus experiencias anteriores, de sus creencias, visión del mundo y autovaloraciones para dar significado a dicho estímulo.  En definitiva, se trata de la combinación de dos tipos de terapias, la cognitiva que estudia pensamientos, actitudes y creencias ( procesos cognitivos) y la terapia conductual, que se centra la conducta en respuesta a estos pensamientos.

En el caso de las personas que sufren depresión, normalmente cuentan con distorsiones cognitivas que dificultan que puedan llevar a cabo una respuesta conductual lógica en una situación determinada. Por ello, los objetivos a conseguir durante la TCC son:

– Aprender a evaluar las situaciones relevantes de manera realista.

– La depresión hace que focalicemos la atención en los aspectos negativos de una situación. Por ello, este tipo de terapia trata que la persona tenga en cuenta todos los datos relevantes en una situación determinada.

– Aprender a reformular, obteniendo soluciones alternativas racionales para conseguir un resultado adaptativo.

Diferentes estudios corroboran el uso de la TCC no solo para la depresión, sino también para otros trastornos como son:Ansiedad, Pánico, diferentes tipos de fobias, T.O.C., trastorno de Estrés Postraumático y Esquizofrenia.